Ley de segunda oportunidad en España

La Ley de Segunda Oportunidad de España fue aprobada en 2015, y busca ofrecer una solución a aquellos ciudadanos que se encuentran endeudados y en situación de insolvencia, permitiéndoles iniciar un nuevo camino sin la pesada carga de las deudas acumuladas.

Esta ley es una de las medidas más importantes y necesarias para atajar la problemática del sobreendeudamiento de las familias españolas, situación que se dio con mayor intensidad a raíz de la crisis económica de 2008.

 

Ámbitos de aplicación

La Ley de Segunda Oportunidad establece un procedimiento legal para que el deudor pueda negociar con sus acreedores el pago de sus deudas, y en caso de insolvencia, cancelarlas o reducirlas. Para ello, se establece la figura del mediador concursal, encargado de supervisar y dirigir el proceso de negociación entre el deudor y los acreedores.

Además, se establece que en caso de insolvencia, el deudor podrá solicitar el beneficio de exoneración del pasivo insatisfecho, esto es, la cancelación de las deudas pendientes de pago, siempre y cuando se cumplan una serie de requisitos y procedimientos establecidos en la ley.

Entre las principales características de la Ley de Segunda Oportunidad, destacan las siguientes:

– Se aplica a personas físicas, autónomos y microempresas con deudas menores a 5 millones de euros.
– Existen dos tipos de procedimientos: el extrajudicial y el judicial, dependiendo de la fase en la que se encuentre la situación de la persona insolvente.
– La ley establece un proceso de negociación de deudas entre el deudor y sus acreedores que puede durar entre tres y cinco años.
– Si el deudor demuestra que no dispone de recursos suficientes para pagar todas las deudas, se puede solicitar el beneficio de la exoneración del pasivo insatisfecho.
– El beneficio de la exoneración no cancela todas las deudas, sino sólo las que no hayan sido satisfechas en el proceso de negociación y que no tengan garantía real.
– El proceso judicial de la Ley de Segunda Oportunidad se limita a la fase de verificación del cumplimiento de los requisitos y la autorización del beneficio de exoneración, para lo cual se requiere la intervención de un juez.

 

Objeto del la ley

Es importante destacar que la Ley de Segunda Oportunidad no busca premiar a las personas que incumplen sus obligaciones de pago, sino ofrecer una solución a aquellos que, por causas ajenas a su voluntad, se encuentran en una situación de insolvencia.

En este sentido, la Ley de Segunda Oportunidad es una herramienta fundamental para fomentar el emprendimiento y la innovación, ya que permite a las personas que han fracasado en sus iniciativas empresariales, volver a intentarlo sin el lastre de las deudas acumuladas.

Asimismo, esta ley también favorece la recuperación económica, al permitir a las personas insolventes reactivar su consumo y comprar de nuevo bienes que antes no podían adquirir debido a las deudas.

 

Controversia acerca de la ley

Por otro lado, la Ley de Segunda Oportunidad no está exenta de críticas y deficiencias, especialmente en su aplicación y en la interpretación de algunos de sus preceptos.

Una de las críticas más comunes se refiere a la falta de agilidad del proceso de negociación, que puede llevar varios años y que en algunos casos resulta demasiado largo y costoso.

Otra de las críticas tiene que ver con la falta de claridad en la interpretación de algunos de los requisitos y trámites del procedimiento, que hacen que su aplicación sea complicada y poco accesible para las personas que no cuentan con asesoría legal especializada.

En conclusión, la Ley de Segunda Oportunidad es una ley necesaria que busca solucionar la problemática del sobreendeudamiento de las familias y autónomos en España, ofreciendo una alternativa real y efectiva para la cancelación o reducción de deudas en caso de insolvencia.

Es una herramienta fundamental para fomentar el emprendimiento y la recuperación económica, pero requiere una mayor atención y mejora en su aplicación y en la interpretación de sus requerimientos y procedimientos.